La intervención ocurrió alrededor después de la medianoche, cuando un vehículo utilitario fue detenido en un procedimiento de rutina. En el interior viajaban tres personas adultas, dos de ellas oriundas de Bariloche y una residente en la región cordillerana. Al ser consultados sobre la carga, negaron transportar productos cárnicos o armas de fuego. Sin embargo, al acceder voluntariamente a mostrar la parte trasera del rodado, los efectivos constataron la presencia de los animales.
El hallazgo sorprendió por las condiciones: seis cabritos orejanos, de corta edad, sin ningún tipo de guía de traslado ni certificado sanitario. Esta situación constituye una infracción directa a la normativa provincial que regula el movimiento de ganado, motivo por el cual se labraron las actas correspondientes y se procedió a la retención preventiva de los animales.
De inmediato, los efectivos rurales garantizaron el resguardo de los cabritos en instalaciones seguras de la unidad policial, hasta que la Secretaría de Ganadería defina su destino. La medida busca proteger la sanidad animal y evitar posibles casos de abigeato, una problemática que afecta a productores de la región.
Este procedimiento refleja el compromiso de la Brigada Rural en la defensa de la producción local y la seguridad comunitaria. Los controles nocturnos en rutas estratégicas permiten detectar irregularidades y prevenir delitos vinculados al traslado ilegal de ganado. La acción rápida y coordinada de los efectivos reafirma la importancia de la presencia policial en las zonas rurales de Río Negro.