La actividad, que tiene como objetivo concientizar a la comunidad acerca del Síndrome Urémico Hemolítico (SUH), contará con la participación del doctor Gabriel Perotti, que explicará la enfermedad desde la medicina, y personal de URESA brindará las medidas de prevención.
La URESA brindará aproximaciones del relevamiento que realizaron en los jardines maternales públicos y privados de Viedma, en el marco de un proyecto de la Red Nacional de Protección de Alimentos (RENAPRA), que está actuando en la prevención del SUH con los municipios que quieran participar.
En este sentido, el Ministerio de Salud en conjunto con la Municipalidad de Viedma, eligieron como escenario del proyecto los jardines maternales para relevar si elaboran y manipulan alimentos, si los niños se alimentan en el jardín, si las viandas se guardan en la heladera, la preparación de mamaderas, el cambio de pañales y las condiciones edilicias. En base al relevamiento, hoy se realizará una devolución.
Esta actividad se realiza en el marco del Día Nacional de Lucha contra el Síndrome Urémico Hemolítico (SUH), que se conmemora cada 19 de agosto, al ser declarado por Ley 26.926 en homenaje al médico Carlos Arturo Gianantonio, quien fue pediatra e investigador científico argentino, reconocido por su valioso aporte en la investigación de esta enfermedad.
Síndrome Urémico Hemolítico
Es una enfermedad causada por una bacteria productora de una toxina, que suele estar presente en los alimentos y en el agua. Es grave y puede traer muchas complicaciones tanto en niños como en adultos.
Se puede transmitir a través de alimentos contaminados como la carne picada de vaca y aves sin cocción completa (o alimentos preparados con ella como: hamburguesas, salame y arrollados de carne, entre otros); la leche sin pasteurizar y/o productos lácteos elaborados a partir de leche sin pasteurizar; aguas contaminadas; lechuga, repollo y otros vegetales que se consumen crudos.
También se puede producir el contagio de persona a persona por prácticas higiénicas inadecuadas, como no lavarse las manos después de ir al baño o cambiar pañales, y antes de comer. Otra vía de contagio es a través de aguas de recreación (piletas públicas, lagunas, piletas de natación).
Por último, existe la contaminación "cruzada" poniendo en contacto alimentos contaminados con otros alimentos no contaminados que se comen crudos, como la lechuga, el tomate y otros.